
<p class="caption-title ">Los impuestos siempre caen en nuestro cubilete </p> <span class="caption-author ">Getty</span>
El Gobierno celebró con Alegría la aprobación de la subida del salario mínimo. Con Pilar Alegría, ministra portavoz del Gobierno, porque para la otra, sinónimo de gozo y regocijo, no había espacio, y eso que en la mesa de la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros quedaba un hueco importante entre la portavoz y la vicepresidenta Yolanda Díaz.
También podría ser que ese vacío en realidad estuviera lleno, como sucede cuando uno viaja en autobús a San Andrés de Teixido, donde “vai de morto o que non foi de vivo”, y tiene que preguntar si están ocupados los sitios vacíos, porque igual se sienta en ellos algún alma en pena, pues aquí lo mismo, solo que con más penas que almas.
La madre de todas las redes, X, ha sentenciado la decisión del lado socialista del Gobierno de imponer el pago de IRPF en el salario mínimo interprofesional, algo que se veía venir, porque el presidente Sánchez siempre dijo que no se iba a dejar a nadie atrás, y en Hacienda tomaron buena nota.
Los impuestos siempre caen en nuestro cubilete
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De todo el baile de cifras que se encuentra en las redes, con Bluesky sumado al campeonato de matemáticas, nos quedamos con lo que ya sabíamos también, que toda subida tiene su truco, como en el baile de la bolita con que los trileros vacían el bolsillo de los incautos: te subo por un lado, te lo quito por el otro. Y la bolita del IRPF siempre cae en el cubilete de nuestros bolsillos.
Primera constatación: quienes más ruido hacen contra el “impuestazo”, como ya se denomina en redes, en el SMI son tirando a la derecha o derecha puramente. ¿Que como lo sabemos? Pues echando un vistazo a sus tuits, vamos como si se tratara de la periodista que rebuscaba en la cuenta de Karla Sofía Gascón.
Uno debería borrar inmediatamente todos sus tuits anteriores al poner uno nuevo, para no dar pistas.
¿Súbito amor por los sectores más desfavorecidos, u otra cosa? Nosotros intuimos cuál es la respuesta, pero dejamos que cada uno se haga su componenda.
Una pregunta surge en X: ¿sabían en Sumar, vamos, sabía Yolanda Díaz que finalmente el SMI pagaría IRPF?Al mismo tiempo, una pregunta surge en X: ¿sabían en Sumar, vamos, sabía Yolanda Díaz que finalmente el SMI pagaría IRPF (es más complicado, ya lo sabemos, pero esto es una columna, no el BOE, y así abreviamos).
A la teoría de la conspiración yolinesca se apuntan desde la derecha hasta la izquierda podemita. Ahora ya sabemos quién ocupaba el espacio vacío en la rueda de prensa.
Y es que aunque de vez en cuando le damos caña a la vicepresidenta y ministra de Trabajo, le reconocemos el mérito de bregar con comentarios como este: “@Yolanda_Diaz_ o pones despido libre para salvar a pequeños empresarios/autónomos o los 5 millones de parados lo vas a tener e incluso lo superarás” (@antonioj_moremo). Nos hemos pegado un susto, y sin tener a un espíritu sentado a nuestro lado en el bus.
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Otros disparan al PSOE, pero con tantas etiquetas para que nadie se quede fuera, cual Pedros Sánchez, que al final te pierdes entre las arrobas y las almohadillas: “A el @PSOE y @oscar_puente_ @oscarlopeztwit se les olvidan muchas cosas en sus post sobre el #SMI es un gobierno de coalición, el @empleogob fue de #UnidasPodemos y ahora de @sumar , el dialogo social fue de @Yolanda_Diaz_ no del @PSOE @NadiaCalvino y @mjmonteroc (@ddgarcia537) (@Yolanda_Diaz_ no del @PSOE @NadiaCalvino y @mjmonteroc” (@ddgarcia537). ¿Perdón?
Pero volvamos a Yolanda Díaz, que es quien se lleva casi todos los palos: “Según el informe de sus asesores se informaba de que se incluía este impuesto al SMI. Vamos, que o lo sabía o no lo llevaba tan bien. Sumar concede demasiado, le quitan por un lado lo que consigue por otro” (@CapPescanova).
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¿Llegará la sangre al río entre PSOE y Sumar? Por supuesto que no, pero mientras tanto “Amo ver como se apuñalan entre ellos” (@Autonomofacha). Con ese apodo, no nos extraña.
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Autor: Isabel Gómez Melenchón