Las claves del ‘look’ de Sydney SweeneySydney Sweeney deslumbró en la fiesta organizada por Armani Beauty durante el Festival de Cine Internacional de Berlín con un estilismo que se ha quedado grabado en nuestra memoria. Tan solo unas horas después de que Hbo, Max y la cuenta oficial de Euphoria anunciaran el retorno de la actriz junto con la sorpresa de que compartiría reparto con Rosalía a la tercera temporada de la serie que ha marcado a toda una generación, la intérprete reaparecía en Berlín con un diseño digno de admiración.La actriz apostó por un vestido tubo impecable firmado por Giorgio Armani, una elección que combinó sofisticación, sensualidad y minimalismo a la perfección. El diseño, que se ajustaba a la perfección a su silueta sin resultar visualmente incómodo, resaltaba su elegancia natural sin necesidad de excesos y con un cierto toque effortless. Con un escote estructurado en forma de palabra de honor con detalles en pedrería disimulada y un largo más abajo los tobillos propiciando una pequeña cola, el vestido irradiaba elegancia en estado puro. La sencillez del vestido le permitió jugar con los accesorios justos en forma de anillos llamativos recordándonos por qué este corte es un imprescindible en cualquier armario de gala.Por qué un vestido blanco es muy buena opciónEl look de Sydney Sweeney demostraba que un vestido de tubo bien elegido puede ser la opción ideal para cualquier evento de noche. Eso sí, si es blanco, mejor reservarlo para ocasiones en las que no haya una novia presente. Este dise se adapta a cualquier ocasión, ya sea algo casual o a los eventos más formales como dicha alfombra roja por la que paseaba la intérprete. Además de ser extremadamente favorecedor con todos los tipos de pieles, la luminosidad intrínseca del blanco lo hace ideal para cualquier temporada, ya sea invierno o verano.Otra gran ventaja de este color es que combina con todo tipo de accesorios, con dorados, con plateados y con todo el espectro cromático que puedas imaginar. Es una opción que te regala libertad plena para crear estilismos de todo tipo de estéticas.Asimismo, es una prenda atemporal, nunca pasa de moda y siempre aporta un aire sofisticado. Los años noventa lo colocaron en forma de slip dress y de vestido de tubo en nuestro imaginario y a día de hoy es un básico imprescindible que resalta la tez propia y aporta el brillo especial que todas buscamos en los momentos más especiales de nuestro día a día.
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Autor: Teresa Romero Martínez
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