
Las sandalias planas (y minimalistas) que repetiré en verano 2025Desde hace ya varias temporadas intento comprar con más cabeza para no caer en un consumo irresponsable de la moda. Sí, me dejo llevar a veces por las tendencias, pero pienso mucho más en las piezas que compro y si les sacaré realmente partido. Más todavía si se trata de calzado.Esta andadura hacia un armario más responsable comenzó concretamente como un propósito para 2023, año en el que intenté con todas mis ganas ponerlo en práctica. Aquel verano, encontré en Zara unas sandalias minimalistas, de tiras, que se sujetaban en el dedo con un pequeño anillo metálico en color dorado –y las personas que me conocen bien sabrán que no me resisto a un destellito sutil y dorado capaz de levantar cualquier look–. Esas ring sandals, nombre que recibieron tiempo después entre las que trabajan en el mundo de la moda, resultaron ser las las sandalias que no me quité en todo el verano. Me las llevé a cenas con amigas, en mi maleta de vacaciones para un road trip por la costa Portuguesa, a fiestas de verano e incluso como repuesto en una boda para cuando no pudiese ni un segundo más encima de mis tacones. En definitiva, se convirtieron en mis sandalias más amortizadas del 2023 y por eso repetí la hazaña en 2024, año en el que se convirtieron en las sandalias más amortizadas de toda mi vida, lo juro. Lo mejor es que, cada vez que me las ponía, todo el mundo me preguntaba por ellas. ¿Los motivos? Son sencillas, pero tienen ese toque elegante que hacía que me las pudiese poner con maxivestidos, con pantalones anchos, con shorts, con un little black dress… Prácticamente con todo lo que cuelga en mi armario.Edward Berthelot/Getty Images
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Autor: Tatiana Ojea