
De todos los tipos de chalecos que son tendencia esta primavera, el comúnmente conocido como chaleco de vestir de mujer es, sin ninguna duda, la prenda omnipresente de la temporada. Para más señas: el que Julia Roberts llevaba con maestría durante buena parte de los 90 y Kate Moss convirtió en su top de confianza allá por los 2000. El mismo que heredó su patrón de una de las piezas clave de la sastrería masculina pero al que después de tantas intervenciones hay veces que resulta inevitable no tanto de reconocer como de clasificar.Precisamente la clave del chaleco de vestir de mujer esta primavera no está tanto en su popularidad —basta con echar un vistazo a las mejores marcas de precio medio y también a las más asequibles para comprobar que su presencia es incuestionable— como en la forma de llevarlo. Este 2025, las tendencias lo señalan como el mejor sustituto del top de vestir, y las marcas acatan esta reconversión proponiendo diseños con largura a la cadera, escotes un poco más elevados de lo habitual en esta prenda (a veces, incluso, a la altura de la clavícula) y una forma de sus (no) mangas que inevitablemente hace dudar de si se trata de un top o, efectivamente, estamos ante un chaleco de vestir de mujer.En cuanto a la forma de combinarlo, el límite está en la imaginación de cada una. Desde el formato dos piezas —una opción que casi siempre está sobre la mesa, ya que la mayoría de chalecos de vestir suelen contar con una parte de abajo, ya sea en formato pantalón de pinzas, falda o bermuda, a juego— hasta con vaqueros balloon y prácticamente cualquier falda o tipo de pantalón que se te pase por la cabeza. Si algo debe reconocérsele al chaleco de vestir es una capacidad de combinación similar a la de la camiseta negra básica (o las mejores camisetas blancas). Uno no se convierte en el nuevo top elegante de confianza así como así.Los chalecos de vestir más especiales de la primavera 2025
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Autor: Lucía Tejo