La espera ha terminado y The Last of Us ha vuelto con una temporada que podría ser aún más intensa, emocional y profunda que la anterior. Con Pedro Pascal y Bella Ramsey al frente, la serie de HBO basada en el aclamado videojuego de PlayStation retoma la historia en un punto clave y nos sumerge de inmediato en nuevos conflictos, revelaciones impactantes y conexiones humanas que ya están dando de qué hablar. El arranque que lo cambia todo La escena inicial nos presenta a un grupo completamente nuevo de personajes con un objetivo en común: matar a Joel. La acción transcurre tres días después del final de la primera temporada, cuando Joel eliminó a todo un hospital para salvar a Ellie. Estos nuevos rostros, liderados por Abby (Kaitlyn Dever), buscan venganza por la muerte de sus seres queridos. Aunque desconocen los motivos exactos detrás de las acciones de Joel, su resolución es clara: encontrarlo y acabar con él. El grupo decide dirigirse a Seattle para reagruparse y planear su venganza, una que no será rápida, sino metódica y lenta. Este primer momento ya deja claro que la historia no va a andarse con rodeos.
Cinco años más tarde, nos encontramos en Jackson, Wyoming. Ellie, ahora con 19 años, ha entrenado en artes marciales con Jesse (Young Mazino) y demuestra ser más fuerte y decidida. Junto a Tommy (Gabriel Luna), practica con rifles francotiradores y enfrenta infectados con valentía. Sin embargo, los años también han dejado huella en su relación con Joel, con tensiones que todos parecen notar.
Joel, por su parte, luce más envejecido y cansado. Durante una de sus rutinas, es visitado por Dina (Isabela Merced), la mejor amiga de Ellie, quien descubre que Joel está yendo a terapia. En Jackson, mientras tanto, todo parece prosperar. La líder Maria (Rutina Wesley) le recuerda a Joel que él también fue refugiado una vez, enfrentando su falta de empatía actual con su propio pasado.
© HBO Secretos, heridas y confesiones difíciles En una escena clave, Joel visita a su terapeuta, Gail (interpretada por Catherine O’Hara), quien, tras una conversación honesta, le revela que sabe que él mató a su esposo Eugene. Aunque siente odio por ello, también se avergüenza de su resentimiento. Esa sinceridad hace que Joel también se abra ligeramente: no hizo daño a Ellie, la salvó. Aunque Gail no entiende del todo a qué se refiere, los espectadores sí, y este pequeño reconocimiento ya representa un gran paso en el viaje emocional de Joel.
Mientras tanto, Ellie y Dina salen de patrulla. Aunque al principio la misión parece más una excusa para charlar y bromear, todo cambia cuando descubren rastros de sangre y deciden investigar. Encuentran un oso devorado, y contra los deseos del grupo, se adentran en un edificio donde terminan enfrentando a un infectado muy diferente: uno que demuestra una inteligencia inusual.
Durante el enfrentamiento, Ellie es mordida en el estómago, pero oculta la herida ya que nadie en Jackson sabe que es inmune. Disimula la mordida usando su cuchillo para que parezca un corte común y corriente. Cuando informan al consejo del pueblo sobre este nuevo tipo de infectado, su testimonio es recibido con escepticismo. Al ser Nochevieja, la mayoría prefiere celebrar que enfrentar una posible nueva amenaza. © HBO Momentos de ternura, tensión y un cierre demoledor Esa noche, Ellie anota sus pensamientos en su diario, dejando entrever que siente algo por Dina. Más tarde, en el baile, Dina la saca a la pista y comparten un beso, interrumpido por un comentario homofóbico de Seth, un vecino. Cuando Ellie está a punto de golpearlo, Joel interviene. Este gesto, lejos de ser bien recibido, molesta a Ellie, quien ya no quiere que la protejan como antes.
El episodio termina con dos revelaciones inquietantes. Primero, una bengala cerca de una tubería activa una reacción extraña en unas raíces, que parecen estar vivas y conectadas con los infectados. Luego, vemos que Abby y su grupo finalmente están cerca de Jackson, armados y listos para enfrentar a Joel. © HBO La premiere de la segunda temporada de The Last of Us lo tiene todo: acción, humor, drama, romance y misterio. Cada escena está cargada de pistas que adquirirán sentido con el tiempo. Un inicio prometedor que anticipa una temporada inolvidable.
Fuente:
Autor: Lucas Handley
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