El Real Madrid sufrió más de la cuenta

Hay dos cosas que se deberían modificar en el fútbol. Una de ellas, el sorteo de campos. El equipo local debería decidir desde dónde comienza el partido. Para eso se juega en su estadio, caramba. La segunda, eliminar las tarjetas amarillas cuando un jugador se desprende de la camiseta para celebrar un gol. Antaño se castigaba con una tarjeta amarilla al jugador que llevase la camiseta por fuera del pantalón. Afortunadamente se corrigió semejante desfachatez. Ya va siendo hora de que se elimine eimine esta otra. Y el que lleve debajo una camiseta con algún reclamo publicitario que lo pague con una multa.El Leganés se llevó dos goleadas en sus últimas visitas al Bernabéu en Liga. De la última de ellas (temporada 2019/20) no quedaba inicialmente ni un solo superviviente (Modric entró en la segunda mitad). En esta ocasión le dio un golpe psicológico al Madrid cambiándole el orden de los campos. Ya se sabe que al Madrid le gusta atacar hacia el fondo sur en los segundos tiempos. Quizá no esperaba el Leganés que le afectase tanto (en realidad no se lo esperaba nadie) pero su estrategia dio sus frutos y al descanso ganaba 1-2 tras dos despistes defensivos. Fue una sorpresa con la que el Bernabéu no contaba, máxime tras hacer Mbappé el 1-0 con un penalti a lo Panenka que le pudo salir mal, sobre todo tras conocer lo sucedido en el Alavés-Rayo.El Madrid salió en la segunda parte como un potro andaluz y muy pronto hizo el 2-2. El Leganés, sin embargo, dispuso de una ocasión inmejorable para hacer el 2-3 tres minutos después. Estaba claro que al Madrid no se le puede perdonar y mucho menos un Leganés que no iba a disponer de muchas oportunidades así en el Bernabéu. El 3-2 en una genialidad de Mbappé lo demostró.Las ausencias de Vinícius, Rodrygo y Valverde no afectaron al equipo demasiado en principio, aunque sí se notó después la presencia de todos ellos. Pero en líneas generales no fue un buen partido del Madrid. Será verdad eso de que siempre sufre tras el parón de selecciones.Este contenido es exclusivo para los usuarios registrados



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Autor: JOSÉ VICENTE HERNÁEZ

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