
<div class="ue-c-article__media-caption-inner"><span class="ue-c-article__media-description">Dirk Nowitzki, junto a Luka Doncic en un entrenamiento de los Mavericks.</span><span class="ue-c-article__media-source"><span class="ue-c-article__media-author">GETTY IMAGES</span></span></div>
El mayor mito en la historia de los Mavericks, Dirk Nowitzki, también se quedó estupefacto cuando conoció que Luka Doncic había sido traspasado a los Lakers. "No me lo podía creer, estaba intentando asumir una cosa que me había dejado petrificado, como a todos”, ha contado el ala-pívot alemán, que en el momento en el que se supo el movimiento estaba de vacaciones en las Maldivas con su familia. "Parecía que me iba a estallar el teléfono. Se volvió loco. Me pasé más de una hora mirando las redes sociales, viendo qué pasaba y asegurándome de que era real, de que estaba sucediendo", ha relatado en una entrevista en la emisora '96.7 The Ticket' de Dallas.Nowitzki tiene una estatua a las afueras del American Airlines Center y pensaba que Doncic podría tener las suya. “Creo que quería tener una carrera como la mía, acabar como yo”, asegura el jugador germano que pasó toda su carrera en los Mavericks: 1.522 encuentros en temporada regular repartidos en 21 temporadas y gran protagonista del único anillo de la franquicia. En su carta de despedida a los aficionados -que no a los Mavericks- el base esloveno dijo que pensaba que pasaría toda su trayectoria en Dallas.Por eso, cuando Nowitzki supo del traspaso, lo primero que le salió fue empatizar con quien fuera compañero durante su último temporada en activo. "Me sentí muy triste por Luka, muy decepcionado. Es obvio que él no se esperaba algo así. Todo el mundo estaba contando que estaba siendo un momento muy difícil para él, que obviamente estaba muy disgustado Me invitó a estar con él en su primer partido en Los Ángeles, y sentí que tenía que estar allí para darle mi apoyo", cuenta el alemán, que fue mentor y amigo de Doncic.Así que, cuando el base esloveno se estrenó con los Lakers en un partido frente a los Jazz, allí estuvo Nowitzki: "Sentí que mi lugar estaba allí, mostrando que le apoyaba en este nuevo paso en su carrera". Eso sí, le costó animar a los angelinos, rivales durante toda su carrera. “Ya me visteis la cara, fue muy raro… Era surrealista ver a Luka jugando con esa camiseta", recuerda antes de lanzar un mensaje de cariño hacia su amigo: "Es obvio que nunca voy a ser fan de los Lakers, pero siempre seré fan de Luka".
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Autor: NACHO DUQUE